No hay mejores vacaciones que un verano familiar en un pueblo perdido en donde nunca pasa nada, si tan solo eso fuera cierto en cualquier parte del mundo. Sara, su hermano Pera y su hija Ariadna, se verán sorprendidos por una espiral del pasado envuelta de codicia y crímenes que convertirá sus vacaciones en una verdadera caldera del diablo. Y además, están los gatos.