¿Cómo es tu proceso de trabajo?
Mi proceso de trabajo ha sido siempre muy 'nómada'. En el caso de "Ninjas", por ejemplo, dibujé las primeras historias en la cama de un hotel en Ámsterdam. Recuerdo que 'las demás Ninja' comentaron lo agradable que era dormirse escuchando solamente el sonido de un lápiz en la oscuridad. Ese era nuestro primer viaje juntas y, como puede imaginarse, un 'típico viaje a Ámsterdam' puede estar muy lleno de anécdotas. En nuestro caso, esas anécdotas dieron lugar a la creación de los personajes y a los primeros episodios Ninja, que no han sido publicados.
A partir de ahí, con libreta y lápiz siempre en mi bolso, las historias surgieron en cada fiesta y reunión, en casas, bares y viajes, hasta convertirse en un entretenimiento social más.
La mayoría de los dibujos no han sido pasados a limpio, de ahí que muchos de ellos sean espantosos pero a la vez conserven la viveza del primer trazo. Los pocos que han sido redibujados lo han sido por cuestiones prácticas, ya que las circunstancias 'nómadas' -o algo peor- en las que fueron dibujados hacían muy difícil su legibilidad.
¿De dónde sale la idea para las portadas?
La portada del primer cómic ninja, en el que las protagonistas se pasean por el barrio rojo de Ámsterdam, rinde homenaje al origen de esta historia, ya que, como he dicho, surgió espontáneamente en esa ciudad.
La portada del segundo cómic muestra la fachada del restaurante preferido por las ninja en Berlín. Estos viajes y otros muchos han sido una constante del mundo ninja y una fuente inagotable de inspiración y diversión. Las portadas, a pesar de no hacer referencia al contenido de los cómics, rinden homenaje a esos momentos.
Read more of this interview.